Cómo elaborar tus propios mosaicos
Elaborar tus propios mosaicos es nada difícil, solo necesitas material de construcción que no se haya usado o haya sobrado, pegamento para cerámicas, masilla y mucha creatividad. A veces, los trabajos decorativos en nuestros hogares requieren ser innovadores y ser el reflejo de lo creativos que podemos llegar a ser.
En esta oportunidad, te guiaremos paso a paso sobre cómo podemos diseñar y elaborar nuestros propios mosaicos para decorar las habitaciones de nuestros hogares, sin necesitar mucho dinero y requerir mayores esfuerzos. Para que tengas algunas ideas de cómo poder realizar tu propio mosaico, puedes visitar una tienda de mosaicos o varias para obtener más ideas.
Elaborando un mosaico, paso a paso
Antes que nada, lo que necesitas es pedazos de azulejos o azulejos enteros. Si tienes azulejos que hayan sobrado después de una construcción o remodelación en tu hogar, puedes usarlos; si no lo tienes, puedes preguntar en una ferretería o a algunos parientes cercanos, sean familiares, amigos o vecinos, si tienen algunos que les hayan sobrado.
Una vez los tengas, no importa el color ni el diseño de las mismas, empieza a partirlos en pedazos; depende de ti si quieres que sean de pedazos pequeñitos, medianos o grandes, la idea es que lleguen a formar las figuras o siluetas de algo que llegue a tu imaginación y, por su puesto, tenga mucha relación con el espacio de tu hogar que deseas decorar.
Los azulejos, que por lo general están hechos de cerámica o porcelana, son materiales que al ser partidos en pedazos, podrían lastimar alguna parte de nuestro cuerpo porque se generan partes filosas o puntiagudas. Por esta misma razón, te sugerimos cubrir los azulejos con alguna tela gruesa y recién golpearlas con un martillo o algo pesado hasta conseguir el tamaño de los pedazos de azulejos que pronto se convertirán en un mosaico.
Seguidamente, puedes prediseñar con un dibujo la figura, silueta o imagen que deseas realizar. Si tienes pedazos de azulejos de múltiples colores, podrías elaborar un hermoso paisaje para tu baño o un canasto de frutas para tu cocina, todo depende de tu imaginación y creatividad.
Ahora bien, el soporte de tu mosaico puede ser un cuadro cuadrado o rectangular parecido a un recuadro de pintura corriente o la misma pared de la habitación que deseas decorar. Calcula previamente el espacio que tienes si deseas decorar una pared, si deseas hacer un tipo recuadro para colgar, elige un soporte resistente en el que puedas pegar tu diseño final hasta conseguir el mosaico.
Para pegar los pedazos de azulejo sobre el soporte que hayas decidido, compra algún pegamento especial para cerámicas o revestimientos, éste sí o sí debe ser resistente y de efecto duradero. Cuando ya hayas logrado pegar los azulejos hasta formas una figura, silueta, imagen o paisaje, recubre los espacios con masilla en tuvo, limpia bien antes de que se seque y listo, tendrás tu propio mosaico.
Dependiendo de ti, puedes hacer uno, dos o varios mosaicos, obviamente, dependiendo de la cantidad de azulejos que tienes a tu disposición. Si deseas más y tienes presupuesto, ve a una tienda de mosaicos y ahí mismo podrás adquirir más azulejos de otros colores y texturas.
Viste que no es nada difícil, pues no requiere de grandes esfuerzos ni de mucha inversión o presupuesto. Si tienes mucha imaginación y creatividad, puedes aprovechar tu talento y abrir tu propia tienda de mosaicos; solo tú decides.